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“Promotores artísticos desacreditados por ladrones”
El destacado promotor artístico Víctor Paulino, conocido en el ambiente, como “El Gordo”, afirmó a ImagenesDominicanas.com que actualmente en República Dominicana, hay muchos promotores “ladrones y truqueros”, que le venden sueños a quienes les contratan, “para ganarle los cuartos”.
Señaló, que hay miles de ejemplos, en el medio criollo, “de empresarios que le han confiado millones de pesos a los promotores dominicanos, y asimismo, se lo han cogido, y no han hecho nada”.
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El ex promotor de la desaparecida empresa, Discomania, enfatizó que los promotores dominicanos, nunca han abogado por crear una entidad que los agrupes, porque como dice un promotor: “son todos ladrones”, haciendo alusión a su real situación.
“Mira, estamos desacreditados en el mundo, no solo como narcotraficantes, sino también como ladrones en esto de la música, aunque hay su excepción”, aclara Paulino.
Artistas como Los Sabrosos del Merengue, Amarfis y su Banda de Atakke, Lokkera, Quico Rodríguez, Zacarías Ferreira, Home Boys, Luís Miguel del Amargue, son parte de los artistas, trabajados “a nivel de calle”, por el promotor.
Víctor Paulino, quien además es un destacado DJ, que por muchos años estuvo ligado a empresas Brugal y Barceló, dijo que hoy en día, los animadores de discotecas, carecen de conocimientos en sus profesiones, porque “solo se preparan para poner discos y ya”.
Reflexionó en el sentido, de que los promotores actuales ahora se lo ganan fácil, desde una oficina donde se les facilita carros y presupuestos, “que antes, no lo hacían”.
Apuntó que la piratería y el recorte de horarios impuestos por el Gobierno, han reducido la vida nocturna en Republica Dominicana y por ende el negocio del disco “está en quiebra”, a tal punto, que solo la disquera Juan y Nelson, sobrevive a la crisis.
Sentenció, por otro lado, que el llamado merengue urbano, no morirá por ahora, “porque es producto de la desintegración familiar, la falta de cultura musical, la payolización de la radio y la televisión y la apertura de las fusiones que vive actualmente el ritmo merengue”.