Turismo
«La Casita de Mimelphys» un lugar especial para quedarse en Constanza
Tras el impacto de la pandemia y la desescalada de las restricciones, muchos visitantes y turistas llegaban a Constanza, lo que incrementó la demanda de habitaciones y por consiguiente esto motivó a los pobladores utilizar espacios en sus viviendas para rentarlos.
Por estar ligada siempre al sector turístico, una comunicadora decidió emprender en el área y dispuso parte de su casa materna, para alquilar habitaciones y dar alojamiento en Constanza.
“La Casita de Mimelphys” es “un sueño hecho realidad” que fue ideado con el propósito de satisfacer la necesidad de hospedaje para viajeros y turistas que visitan este municipio de La Vega.
El hotel boutique enfocado en la excelencia, ofrece un servicio al más alto nivel, “consintiendo al huésped y ofreciéndole una maravillosa experiencia”, explicó Mimelphys Batista a idominicanas.com
Con una decoración ecléctica -entre lo moderno y campestre- el acogedor aparta-estudio cuenta con diversos elementos artesanales y funcionales que dan la sensación para sentirse como en casa; haciendo más especial la estadía en Constanza.
“La experiencia ha sido muy buena y desde que iniciamos a mediados de noviembre 2021, hemos hospedado a gente que viene a descansar, otros a trabajar y muchos que vienen para conocer a Constanza”, cuenta Batista calificada como súper anfitrión en Airbnb.
Uno de los principales activos turísticos y “lo que más la gente disfruta en Constanza es el clima, un activo intangible que la gente valora” expresó la comunicadora y emprendedora turística.
Los confortables espacios del hotel boutique se rentan para fines de semana, cuando es mayor flujo de visitantes o igual para una noche en Constanza, donde llegan personas todos los días. (Pueden reservar por WhastApp: 829-281-2728)
Ofrecen todos los atractivos como: restaurantes, bares, cafeterías, por igual gestionan el contacto directo con organizadores de tours a lugares de interés en Constanza como “las pirámides”, Valle Nuevo, rutas a plantaciones agrícolas y por supuesto conocer el salto más alto de las Antillas: “Aguas blancas”.
Hace poco una turista rusa viajó por dos días solo para volar en parapente y decidió quedarse cuatro, así sucede con muchos.
“Muchos visitantes se sorprenden cuando ven las plantaciones y conocen como se producen los rubros” dijo la comunicadora al destacar el tour guiado por los invernaderos de Fresas Ariyama “El Ranchito de las Fresas”, donde las cultivan como negocio agrícola y cuyos regentes se idearon una ruta para mostrar a los visitantes como se producen esta fruta.
Bastista destacó que la gente conoce los frutos, pero “no tiene ni idea de cómo se producen” pero al visitar las fincas, los turistas se quedan maravillados”, resultando una experiencia maravillosa y diferente poder sacar una papa, zanahoria directamente en las parcelas y hablar con los hombres que cultivan la tierra.
A parte del confort que ofrecen -a la altura de los hoteles en la zona- dar al huésped lo que necesita desde antes de llegar es parte del servicio que tiene un precio competitivo con otros hospedajes en Constanza.
“Una turista rusa viajó solo a volar en parapente, vino por dos días y decidió quedarse cuatro; así sucede con muchos turistas nacionales o extranjeros, en especial canadienses, estadounidenses y en mayor cantidad europeos contó Mimelphys que dijo está haciendo una prueba, ya que su idea es construir toda el área para habitaciones.
El hotel boutique que conserva parte de la estructura de su casa materna, tiene dos habitaciones, muebles artesanales en madera, cocina equipada, mini bar con bebidas nacionales y picaderas (no incluido), televisión con Cable, WiFi, agua caliente, terraza común y otra pequeña área para BBQ en proceso de instalación.
Los huéspedes pueden utilizar la terraza -ambientada con plantas y cuadros decorativos- como área de esparcimiento, donde hay una hamaca tipo silla colgante, para leer o compartir.
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