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Energía de respaldo: clave de prevención ante emergencias
La naturaleza nos ha demostrado que no juega; y para muestra la fuerza de los huracanes, que en la actualidad están considerados como una de las principales amenazas naturales que enfrenta la humanidad.
Además de los daños asociados con el medio ambiente y contra la vida de las personas, los huracanes pueden causar graves perjuicios a la infraestructura habitacional y comercial, dejando edificios y casas inundados y hasta destruidos.
Aunque ante un huracán siempre se pondrá sobre cualquier otra cosa, la vida humana; es importante que durante y después del desastre se cuente con energía eléctrica de respaldo, pues es casi seguro que las redes de distribución sufrirán interrupciones o quedarán totalmente inhabilitadas.
Las líneas eléctricas y las empresas de servicios o distribuidoras son extremadamente vulnerables a daños por huracanes o tormentas severas. En esto, el país y estado de la infraestructura eléctrica juegan un papel importante ya que esto influye que las interrupciones duren unas horas, días o meses.
¿Quién no recuerda el huracán María ?, el devastador ciclón que, tan sólo en los primeros momentos, dejó sin luz a 3,4 millones de habitantes en Puerto Rico, isla que aún hoy se sufre por apagones debido a que no ha sido posible restablecer el servicio de manera total.
También en República Dominicana, María dejó sin electricidad a más de 180 mil 794 clientes, según datos de la Dirección de Distribución de EDENORTE Dominicana.
“Es mejor estar preparados -la energía de respaldo es la clave- para cualquier emergencia, y no ser sorprendidos por un desastre natural”, señala Frank Moreno, Director Marketing & Distribution Development Latam en Generac.
La empresa considera que «pueden ofrecer soluciones viables para guiar a dueños de viviendas o negocios para contar con la energía eléctrica necesaria durante y después de una tormenta, pero también es crítico que los propietarios entiendan que la mejor manera de prevenir es estar preparados”, comenta Moreno.
Algunos de los beneficios que proporcionan soluciones de respaldo de energía son:
–Protección contra las interrupciones en el suministro y restablecimiento automático de la energía pocos segundos después de producirse el apagón
–Energía de respaldo proporcionada por generadores portátiles o estacionarios, los cuales representan un complemento perfecto para muchas actividades en el hogar o en el trabajo
-La mejor calidad de energía en su clase con menos del 5 % de distorsión armónica total, lo cual significa un funcionamiento limpio y delicado de los electrodomésticos y aparatos electrónicos
–Flexibilidad de instalación y reducción de costos. Además, el estilo neutral, color y tamaño compacto de los generadores encaja discreta y elegantemente en el lugar en donde se instale
Generac cuenta con la más amplia gama de productos en el mercado, incluyendo los generadores de respaldo residenciales, comerciales e industriales, así como los generadores portátiles y móviles utilizados en una variedad de aplicaciones.
Aunque la temporada de huracanes es prolongada, es importante prepararse con anticipación a la emergencia. La energía de respaldo ofrece a los residentes la posibilidad de continuar su vida ordinaria; por ejemplo, mantener sus alimentos conservados por un mayor periodo, extraer agua de tanques o cisternas, mantenerse comunicados, sentirse más seguros y protegidos, entre otros.
Los generadores portátiles de electricidad mantienen operando las aplicaciones críticas del negocio, luces de las instalaciones, dispositivos móviles como teléfonos inteligentes y computadoras portátiles pueden ser recargados, y las actualizaciones del estado del clima pueden estar disponibles en televisión, radio o internet, para apoyar la toma de decisiones.
Si tomamos en cuenta escenarios como lo ocurrido en la temporada de huracanes de 2017 en el Atlántico, que con un total de 17 tormentas registradas, de las cuales 10 se convirtieron en huracanes; está catalogada como la quinta más activa desde que se llevan registros de los ciclones a partir de 1851, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
Incluso, dada la actividad que presentó en número e intensidad de dichos fenómenos, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos calificó la temporada de 2017 como «extremadamente activa» y la más devastadora en lo que va del siglo XXI, después de la registrada en 2005.
Como cada año, la amenaza se vuelve a hacer latente, pues según el Centro de Predicción Climática de la NOAA, la temporada de huracanes 2018, inicia formalmente el 15 de mayo y finaliza el 30 de noviembre para la cuenca del Pacífico oriental y central, mientras que, en la cuenca del Atlántico, incluyendo el Golfo de México y mar Caribe, la misma comienza el 1 de junio y termina oficialmente el 30 de noviembre.
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