Flamboyan reluciente en el Cibao

El fotógrafo Juan Guzmán, discurría por la carretera Santiago Moca y en un momento se distraje al ver que el Flamboyan de la casa de los Taveras estaba florecido.

«Esa lapsus me costó un desvío del carril y paré al borde de una profunda cuneta; perdí una de las llantas frontales del vehículo y por suerte puede salir de allí.
Lo maravilloso es que con tan solo una llamada, en breves minutos tenía asistencia de un familiar, herramientas y goma de repuesto». cuenta el fotografo.

En el interín realizó la fotografía de lo que fue motivo de su distracción: La casa de Pibín y Gelita de la que en otro espacio habíamos publicado antes, pero que en esta es «algo así como sí la naturaleza se enfocara en mantener siempre fresco y reluciente ese altar de la historia»

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